El entorno empresarial digital y la necesidad de las empresas de adaptarse a él ha dado como resultado una mayor implementación de las TIC en ellas y, como consecuencia en muchos casos, una mayor dependencia de las compañías de los sistemas e infraestructuras informáticas.
Este hecho expone a las empresas a gran escala a poder ser hackeadas. Por ello es por lo que, es preciso disponer de protocolos internos de seguridad en los que se lleven a cabo análisis periódicos de los sistemas e infraestructuras.
Las empresas vulnerables, informáticamente hablando, se convierten en el punto de mira de los hackers. Ante la vulnerabilidad y posibles fallos o brechas de seguridad, estos delincuentes aprovechan para realizar acciones maliciosas en contra de tu compañía y en favor de sus intereses delictivos.
La implementación de barreras es un aspecto clave para la prevención de riesgos. Muchas empresas dejan estas acciones de lado por pensar que no son vulnerables. Hasta que se ven atacados y no pueden solventar el problema.
Las principales amenazas que puede sufrir una compañía son los ataques de phishing y la suplantación de identidad. Esto no resulta difícil de creer considerando que esta técnica es la más empleada para realizar acciones maliciosas que derivan posteriormente en otras más perjudiciales para la organización. Tal es así que, en 2020, esta técnica conformó el 91% de los ataques según un informe realizado por Trend Micro.
Pero, como era de esperar, existen más tipos de amenazas que están cada vez más presentes, que para aquellos directivos que desconozcan la jerga informática y no dispongan en su empresa de un equipo informático especializado que sepa detectar estas amenazas, es verdaderamente un problema.
Algunos de estos tipos son:
Sin duda alguna, tras la llegada de la COVID 19 en 2020, el 2021 vendrá posiblemente marcado por un gran volumen de ataques cibernéticos tal y cómo sucedió el pasado año. Siguiendo el informe mencionado anteriormente, las ciberamenazas en el año 2020 tuvieron un incremento de hasta un 20%, alcanzando una cifra de 62.600 millones de delitos. Estas cifras, implican un sinfín de retos en cuanto a seguridad informática se refiere para el 2021.
Es momento de tomar acción y darle un giro a las estrategias empresariales. Considerar la seguridad informática como elemento fundamental para evitar las posibles consecuencias negativas, o incluso cierre de empresas en algunos casos extremos, que puedan derivarse de los ataques cibernéticos.
Evitar las amenazas y las brechas de seguridad se convierte pues, en un aspecto fundamental. Para ello, contar con herramientas de seguridad, mantener los sistemas actualizados, realizar análisis de control, mejorar la seguridad de los equipos con mantenimientos técnicos, entre otros, se convierten en retos para este 2021.
Para estar a la altura informáticamente y darle a tu empresa la seguridad que precisa debes contar con un equipo informático que sepa detectar fallos y brechas en los sistemas. ¡El equipo informático y técnico es tu mejor aliado! ¿Te vas a arriesgar a ser atacado?